lunes, 8 de diciembre de 2008

Al alba venid, buen amigo,
al alba venid.

Amigo el que yo más quería,
venid al alba del día.

Amigo al que yo más amaba,
venid a la luz del alba.

Venid a la luz del día,
non trayáis compañía.

Venid a la luz del alba,
non traigáis gran compaña.

(Cancionero español)

sábado, 25 de octubre de 2008


...Y POR CASTILLA VEO UN ÁRBOL

...y por Castilla veo un árbol
y parece que veo a alguien de mi familia.

(Gloria Fuertes)

XXI

Dímelo una vez más, tú continúa
diciendo que me quieres. Aunque suene,
como dices, al canto del cuclillo.
Que nunca la llanura o las colinas,

los valles y los bosques son del todo
verdor de primavera sin su canto.
Amor mío, en mis sombras donde hay voces
de duda que me hieren, yo te imploro:

Dime otra vez ¡te quiero! ¿Qué más da
que haya muchas estrellas en la altura
o muchas flores adornando el año?

Di que me quieres, di te quiero, es como
un tañido de plata... Aunque no olvides
tu quererme en silencio con el alma.

(Elizabeth Barret Browning)
-en traducción de Carlos Pujol-

domingo, 6 de julio de 2008

sábado, 5 de julio de 2008

Te soy de corazón y estoy manchado
de sangre hasta la luz. Mis manos rojas
sostienen los zafiros donde brilla
tu mirada en el centro de lo azul:
muerte tan necesaria como yo.

(Juan Eduardo Cirlot)

sábado, 7 de junio de 2008

DONDE HABITE EL OLVIDO

Donde habite el olvido,
En los vastos jardines sin aurora;
Donde yo sólo sea
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
Donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
No esconda como acero
En mi pecho su ala,
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allá donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
Sometiendo a otra vida su vida,
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
Disuelto en niebla, ausencia,
Ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;
Donde habite el olvido.

(Luis Cernuda)

sábado, 31 de mayo de 2008


PARAÍSO

Alzo apenas los ojos
Y en la inmóvil justicia que allá arriba
Distribuye sin la sombra de una duda
El verde y el azul
Veo pasar el vuelo exacto
De un pájaro que allí tan cerca
Pero tan intocable
Está cruzando un paraíso

Oh sí -así es como avanzamos
Siempre tan cerca del deslumbramiento
Sabiendo que jamás será avanzando
Como lo alcanzaremos
Que él seguirá marchando a nuestro lado
Siempre a unos pocos metros.

(Tomás Segovia)

jueves, 22 de mayo de 2008

domingo, 18 de mayo de 2008

Apágame los ojos: puedo verte;
ciérrame las orejas: puedo oírte,
y sin pies puedo andar hacia ti,
y aun sin boca puedo invocarte.
Arráncame los brazos y te asiré
con el corazón como con una mano,
detén mi corazón y latirá mi cerebro,
y si incendias mi cerebro
te llevaré en mi sangre.

(Rainer Maria Rilke)
-en traducción de Joan Parra-

viernes, 16 de mayo de 2008

DE MI OLOR DE HOMBRE

En los árboles asesinados
aúllan los infiernos.
Duerme el verano en miel virgen,
el lagarto en su infancia de monstruo.

De mi olor de hombre,
gracia al aire de los ángeles,
al agua mi corazón celeste
en la fértil oscuridad de célula.

(Salvatore Quasimodo)
-en traducción de Antonio Colinas-

martes, 1 de abril de 2008

ESTE PERRO

¡Este azul de aquel azul,
alma más bella que el ámbito!
El dios azul nos azula
aquí las cosas de abajo.

Lo alto en el allí de aquí
ha venido hasta la mano;
anda por las calles solas
un dios azul perro manso.

Pero ¿será esto verdad?
Este perro con quien ando,
¿no es alto donde lo vi
como el dios azul más alto?

(Juan Ramón Jiménez)

miércoles, 12 de marzo de 2008

ESCRIBO

Escribo ya con la noche
en casa. Escribo
sobre la mañana en que escuchaba
el rumor de la cal o de la lumbre,
y sólo tú eras
quien decía mi nombre.
Escribo para llevarme a la boca
el sabor de la primera
boca que besé temblando.
Escribo para ascender
a las fuentes.
Y volver a nacer.

(Eugénio de Andrade)
-en traducción de José Ángel Cilleruelo-

sábado, 8 de marzo de 2008

LÚDICO

Me cuesta bajar el poema del aire
allí donde me hundo con el plumaje vertical
de las palabras.
Rozando el infierno y el invierno
el poema es un dios de pies ligeros
apaleado por las estrellas.

(José Barroeta)

viernes, 7 de marzo de 2008

Con las manos se forman las palabras,
con las manos y en su concavidad
se forman corporales las palabras
que no podíamos decir.

(José Ángel Valente)